IICE: El empresariado nacional sigue optimista, pero su positivismo cedió terreno

Encuesta de Expectativas Empresariales para el tercer trimestre del 2024

09 JUL 2024

En términos generales, el empresariado costarricense sigue viendo el futuro cercano con esperanza, aunque con menos positivismo del que tuvo de cara al segundo trimestre. Esa es la principal conclusión que se extrae del Índice de Expectativas Empresariales (IEE) de cara a los meses de julio, agosto y setiembre de este año, el cual tuvo una calificación de 56,0 puntos, lo que significa una reducción 1,6 puntos porcentuales (p. p.) en comparación con el estudio anterior.

Esta encuesta del Instituto de Investigación en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR) se realizó del 20 de mayo al 7 de junio de este año. Se consultaron a 434 personas de diferentes empresas de los sectores servicios, manufactura, construcción, comercio y agropecuario.

Si se desagregan los resultados estas áreas, se observan tendencias a la baja y al alza. Los del primer grupo, que vieron caer sus expectativas, son servicios (52,2 puntos, una reducción de 5,7 p. p.), manufactura (58,0 puntos, -1,4 p. p.) y construcción (61,8 puntos, -1,2 p. p.). No obstante, cabe destacar que este último sector sigue con la calificación más alta de los cinco evaluados.

En cambio, los que mostraron una mejoría son el de comercio (60,2 puntos, mejora de 1,4 p. p.) y el agropecuario (51,2, +2,3 p. p.). No obstante, este último sigue siendo el menos positivo de todos los analizados, aunque se encuentra en el espacio optimista (superior al nivel de 50).

Algo que llama la atención es que todos los sectores se ubican en el rango de expectativas positivas (mayores a un puntaje de 50), algo no ocurría desde la encuesta realizada por el IICE para el tercer trimestre del 2018. Aunado a lo anterior, la nota de 56,0 supera en 2,4 puntos porcentuales el promedio de los terceros trimestres de los años anteriores.

La perspectiva de empleo continúa a la baja

Al calcular la diferencia entre las respuestas de las empresas que prevén nuevas contrataciones menos las que visualizan despidos, la encuesta del IICE da como resultado 10,6 p. p. favorables al primero grupo. Pero este número se redujo en -2,4 p. p. con respecto a este mismo balance en el último análisis hacia el segundo trimestre.

Además, la investigación señala que, al menos, dos terceras partes de las empresas consultadas mantendrán la cantidad de empleados para este tercer trimestre (2 puntos porcentuales más que en la anterior). De ese 65 % mínimo en todos los sectores, el 27,4 % aseguró que no habrá más adiciones a su planilla porque realizó contrataciones entre abril y junio.

Si se toma en cuenta la totalidad de las respuestas, el 72,2 % aseveró que no vendrán cambios en el tamaño de sus colaboradores. En cuanto a las firmas que planean contratar personal, estas sumaron el 19,2 % (2,5 p. p, menos que en la encuesta de marzo que hizo la previsión para los meses de abril a junio), mientras que las que prevén despidos suman el 8,6 %, porcentaje casi igual al último análisis.

El sector que más planea realizar contrataciones es comercio: así lo prevé el 31 %. El que se plantea la posibilidad de más despidos es el agropecuario, con un 18 % y el que pronostica más estabilidad es servicios, con un 77 %.

Llama la atención que el sector construcción muestra una seria contracción en su balance de empleo particular, pues este se redujo en 21,0 p. p. con respecto a la encuesta de marzo. Lo mismo pasó con manufactura y servicios, pero con márgenes menores (-5,8 p. p, y -5,1 p. p., respectivamente). En cambio, en el sector de comercio este mejoró en 15,4 p. p., así como en el agropecuario (2,2 p. p.).

Si se toma en cuenta el tamaño de los negocios por la cantidad de colaboradores, son las pequeñas empresas las que más piensan contratar personal, con un 49,4 %. Les siguen las medianas, con una expectativa del 29,0 %, las grandes y, finalmente, las microempresas, con un 9,6 %.

Pesimismo ataca previsión hacia ventas y producción

El balance neto de las ventas y producción para este tercer trimestre es 9 puntos porcentuales menor al que hubo para el segundo trimestre. Si se toman los datos por cada sector por separado, se observa que el más optimista en este apartado es el de comercio, donde el 57 % espera que sus ventas suban.

En cambio, el más pesimista es el de servicios, pues el 19 % de sus respuestas temen un descenso en sus ventas. Finalmente, los más estables en su producción son el agropecuario y construcción, ambos con un 46 %.

Sobre los fundamentos dados para sus opiniones, el empresariado optimista lo está porque asegura que espera más demanda por la apertura de nuevos mercados y por los contratos y proyectos que iniciarán en julio, agosto y setiembre. En cambio, en el pesimista pesan más el ciclo del mercado, la competitividad y los factores estacionales.

El informe del IICE señala que, si se comparan estas variaciones con el promedio anual, hay valores por encima del promedio (variando entre 7,0 y 16,0 puntos porcentuales) en servicios, manufactura y agropecuario.

Con respecto a las utilidades que puedan generar las empresas, la muestra consultada señala que espera un comportamiento de regularidad o crecimiento en comparación con la situación vivida en los últimos meses.

Así, por ejemplo, en los sectores de comercio y manufactura es incluso mayor la cantidad de voceros de negocios que aguardan un crecimiento en sus utilidades (51 % y 49 %, respectivamente). En cambio, para los sectores de construcción, servicios y agropecuario, la suposición es que estos rendimientos se mantengan sin cambios. Finalmente, de todas las áreas, es la agropecuaria la que tiene la visión más negativa sobre sus utilidades, pues una tercera parte espera que decrezcan, número muy superior al del resto de categorías.

Como un detalle adicional, el balance neto de este trimestre es más positivo con respecto al anterior en comercio, servicios y manufactura y a que el promedio en todos los sectores (excepto el agropecuario).

Mejora positivismo en competitividad, pero disminuye en inversión

El informe del IICE también señala que la visión de la competitividad para el tercer trimestre del 2024 mejoró en todos los sectores en al menos un punto porcentual, con excepción del de manufactura.

En términos generales, la expectativa sobre este rubro tiene números más altos en comparación con la que había para el segundo trimestre, pero no es tan buena como la del promedio del último año. Ya en números, entre el 54,0 % (construcción) y el 26,0 % del empresariado espera que la posición competitiva de su empresa mejore y entre el 46,0 % y 67,0 % espera que siga igual. En cambio, solo un máximo del 8 % (agropecuario) teme que empeore.

Al apuntar hacia inversiones en sus empresas en temas como herramientas y equipo, infraestructura, maquinaria, tecnologías de información y comunicación y software, y en otros insumos, el informe del IICE revela que solo el 13 % de las personas consultadas se plantea realizar compras relacionadas con esos implementos. Estos son 3,2 p. p. menos que la previsión hacia el segundo trimestre.

Si se toma la encuesta como un todo, el empresariado que no prevé hacer nuevas inversiones creció de 55,8% a 65,0%. Segmentado por sectores, es en el agropecuario donde habrá más inversiones (16,0 %), mientras que el de comercio hará menos (8,0 %).

Empresariado espera alza en el del tipo de cambio

El aumento en la cotización del dólar vivido en los últimos meses parece haber afectado las respuestas sobre lo que las personas empresarias suponen que podría pasar con el tipo de cambio para el tercer trimestre.

Esto porque, en términos generales, casi la mitad de la muestra afirmó que espera un incremento en el valor del dólar (49,5 %, muy distante del 22,7 % hacia el segundo trimestre). Quienes creen que la divisa estadounidense se mantendrá con valores similares descendieron del 55,2 % al 33,6 % y aquellas empresas que consideran que este precio disminuirá cayeron a la mitad (del 14,7 % al 7,6 %).

Estos resultados rompen con la tendencia de las últimas encuestas, donde se esperaba de forma mayoritaria que el dólar mantuviera su valor.

Al consultar a las empresas de los sectores agropecuario y manufactura si son o no exportadoras, el 21,9 % afirmó que sí vende sus productos al extranjero. De ese porcentaje, el 44,0 % dijo exportar menos de la mitad de su producción, el 30,0 % dijo que sacaba más de la mitad y el 19,0 % indicó que lo hacía con entre una cuarta parte y la mitad.

Encuesta de Expectativas Empresariales – III trimestre 2024



Periodista: Pablo Mora Vargas
Oficina de Divulgación e Información
pablo.moravargas@ucr.ac.cr

IICE: el empresariado nacional mantiene su positivismo en la economía para este año

Encuesta de Expectativas Empresariales para el segundo trimestre del 2024

Todos los sectores productivos continúan con un aire optimista sobre sus expectativas

23 ABR 2024

Las previsiones económicas del empresariado costarricense continúan siendo alentadoras en este 2024. Así lo afirman los resultados del Índice de Expectativas Empresariales (IEE) para el segundo trimestre de este año, el cual tuvo una calificación de 57,5 puntos, prácticamente el mismo de la última encuesta realizada para el primer trimestre del 2024 (56,9 puntos).

Además, hay una leve mejoría si se compara el resultado más actual con el promedio de los segundos trimestres de los últimos años, que el dato más actual supera por 3,5 puntos porcentuales. De hecho, es la mejor nota dada por el empresariado para un segundo trimestre desde la registrada en el 2012 (57,8).

Según la última Encuesta Trimestral Sobre Opinión de Empresarios (ETOE) realizada por el Instituto de Investigación en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR), esta situación se replica en prácticamente todos los sectores que se suelen consultar: agropecuario, construcción, comercio y servicios. Este último análisis se realizó del 19 de febrero al 7 de marzo de este año, para el cual se consultó a personas de 415 empresas de los sectores económicos mencionados.

Solo en el caso de manufactura se detectó una baja importante (-3,1 puntos) aunque esta es insuficiente para minar las promisorias expectativas de este sector (59,5 puntos). También cabe destacar que la única actividad económica que aún no alcanza el “terreno optimista” es el agro (puntaje de 48,9), aunque tuvo una mejora simbólica de 1,4 puntos con respecto a la encuesta anterior de finales del 2023. En términos generales, donde están las opiniones más optimistas es en construcción (63,0), lo cual no deja de ser llamativo, ya que hace dos años era el sector más pesimista.

Baja la perspectiva de empleo para el segundo trimestre

Al menos el 63 % de los sectores consultados espera mantener su planilla sin cambios, número muy similar al que arrojó la encuesta pasada. De esa cifra, un 29 % afirma que su decisión se basa en que realizó contrataciones en los últimos tres meses.

Si se toman en cuenta todas las respuestas, casi siete de cada 10 participantes en la encuesta no esperan hacer cambios en el número de su planilla, mientras el 21,7 % sí se plantea integrar nuevos miembros y el 8,7 % cree que hará reducciones.

Esto significa un balance neto de 13 puntos porcentuales (posibles contrataciones menos posibles despidos), es decir, existe una perspectiva de empleo más negativa que hace tres meses, cuando este porcentaje fue de 19 puntos porcentuales (p. p.). A la inversa, hay más optimismo en este dato si se le compara con el balance para el segundo trimestre de los últimos 14 años (3,9 p. p. en promedio).

Por su parte, las respuestas sobre un posible incremento del personal para este segundo trimestre en las empresas varían entre el 15 % del agropecuario y el 33 % de construcción.

Si se toma en cuenta el tamaño de la empresa y los movimientos de planilla, las “pequeñas” son las que esperan una mayor contratación, con un 52,2 % de respuestas, seguidas de las “medianas” y “grandes” (18,9 % y 16,5 %, respectivamente) y, por último, las “microempresas”, con un 13,3 %.

Ventas, producción y utilidades son vistas con positivismo

El balance del empresariado que estima un buen segundo trimestre para las ventas y la producción es superior al que presentaba la encuesta para el primer trimestre, con mejoras de entre 14 y 37 puntos porcentuales, dependiendo del sector. Incluso, la diferencia es mejor que la mostrada, en promedio, el año pasado.

Ya por áreas de actividad económica, la que más espera un aumento en las ventas y producción es la agropecuaria, con un 44 %; seguida de construcción, con un 38 %. En cambio, la que más negativa se muestra es la de servicios, pues el 20 % cree que estos factores disminuirán en el trimestre en curso.

El empresariado más positivo considera que existe una mayor producción y capacidad en las ventas, además de que ha visto mejoras en el movimiento de su mercado, así como una mayor capacidad de producción e implementación de nuevos productos y distintas presentaciones. En el sentido opuesto, el más pesimista se queja de los factores estacionales durante los meses analizados, el comportamiento del dólar y la competitividad de su sector.

Al igual que con las ventas y la producción, los resultados de la encuesta también reflejan una mejora en la esperanza de mayores utilidades para los negocios en el segundo trimestre del 2024. De hecho, para todos los sectores menos el agropecuario, es superior la expectativa de que estas mejoren a que se mantengan o bajen.

Así ocurre en construcción (67 %), manufactura (50 %), comercio (48 %) y servicios (45 %). En el agropecuario, prima la idea de que las utilidades se mantendrán iguales (54 %) y es el que más teme que estas puedan bajar, aunque con un porcentaje reducido (20 %). Si se comparan esas cifras con los datos promedio del último año, nuevamente es el sector construcción el que presenta la mayor mejora, seguido del de servicios. En cambio, para los otros existe un empeoramiento en su perspectiva de entre el 1 % y el 6 %.

Desciende positivismo en competitividad, pero la inversión mejoraría

A pesar de que la gran mayoría del empresariado prevé que la posición competitiva de su negocio se mantenga o mejore, si se comparan las respuestas netas con los resultados en promedio del último año, estos son menos halagüeños en todos los sectores.

Ahora bien, si se desagregan los resultados por área, comercio es la que espera una mejor competitividad de sus operaciones, con un 52 %, mientras el agropecuario es el que presenta la perspectiva más negativa, con un 15 %. Pero, en términos generales, las respuestas mayoritarias asumen que el panorama competitivo en su sector se mantendrá igual, con respuestas que oscilan entre el 45 % y el 54 %.

También, de forma mayoritaria, las empresas no prevén realizar nuevas inversiones en elementos como herramientas y equipo, infraestructura, maquinaria, tecnologías de información y comunicación y software, y otros. Las dos áreas que más plantean atreverse a realizar este tipo de adquisiciones son manufactura (18,0 %) y servicios (17,5 %), mientras que el menor porcentaje es el del comercio (12,3 %). Los porcentajes que no saben si realizarán nuevas compras de esta índole oscilan entre el 23,6 % y el 33,6 %.

En promedio, el empresariado que estaría haciendo nuevas inversiones es el 16,1 %, esto son 2,4 p. p. más de lo dicho para el primer trimestre. En este sentido, el sector que mejoró más su expectativa (con respecto a la encuesta anterior) de inyectar más recursos a su empresa en los elementos mencionados fue el de construcción (+ 4,7 p. p.).

Empresas prevén estabilización del tipo de cambio

Al igual que ha ocurrido en otras encuestas anteriores, la mayor parte de los individuos consultados por el IICE (55,2 %) manifestaron que el precio del dólar en el país no tendrá grandes variaciones. De ese porcentaje, 4 de cada 10 respuestas señalaron que este efecto no afectará la posición competitiva de sus empresas; una cuarta parte afirmó que les beneficiará, mientras tres de cada 10 más bien dijo que una situación así perjudicará a sus negocios.

El sector que más apuesta por la estabilidad en el tipo de cambio es el agropecuario (68,3 %). Cabe destacar que, durante el periodo de aplicación de la encuesta, el dólar mantuvo un valor promedio de 517,2 colones y durante la consulta para el primer trimestre el precio promedio fue de 518,8 colones, es decir, hubo una estabilidad clara en este factor.

En tanto, el tipo de negocio que más considera que la divisa estadounidense bajará aún más es el manufacturero (18,2 %). En el sentido contrario, el que más afirma que esa moneda aumentará su valor en el segundo trimestre es construcción, donde una tercera parte de las respuestas así lo señaló.

Si se desglosan estos resultados entre empresas exportadoras y no exportadoras, el 61 % de las primeras sostienen que el valor del dólar les afectará negativamente, el 30,6 % señala que no provocará ningún efecto y solo el 8,2 % considera que les beneficiará. En el caso de las segundas, el mayor porcentaje se concentra en el empresariado que afirma que el tipo de cambio no surtirá ningún efecto en sus operaciones (46,9 %), el 30,7 % se muestra esperanzado en que los beneficiará y el 22,3 % que los perjudicará.

Finalmente, el 20,6 % de las empresas consultadas aseveró que exportan sus productos (únicamente entre los sectores agropecuario y manufactura). Dentro de este grupo, el 42,0 % indicó que exporta menos de una cuarta parte de su producción, el 39,0 % exporta más de la mitad y el 12,0 % exporta entre una cuarta parte y la mitad, mientras que el 7,0 % no respondió.

Encuesta de expectativas empresariales – II Trimestre 2024



Periodista: Pablo Mora Vargas
Oficina de Divulgación e Información
pablo.moravargas@ucr.ac.cr

El IICE destaca el buen comportamiento de la economía nacional en su último análisis del 2023

Una mayor productividad de empresas en régimen definitivo, un menor déficit fiscal y un mejor rendimiento del sector externo hicieron que los números económicos del país cerraran mejor de lo esperado

4 ENE 2024

teletrabjo disminuye
La Universidad de Costa Rica (UCR) apunta a que el crecimiento del país en estos doce meses que acaban de concluir estaría entre un 4,25 % y un 4,83 % (foto Archivo OCI). 

El 2023 habría cerrado como un año relativamente bueno para la economía nacional, tras un trienio (2020, 2021 y 2022) que fue sumamente duro, producto de la pandemia y sus efectos en la productividad nacional. En su penúltimo informe el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR) apunta a que el crecimiento del país en estos doce meses que acaban de concluir estaría alrededor del 4,7 %.

Este panorama dista mucho del pronosticado por el IICE hace casi un año, cuando estimó una mejora de tan solo 2,3 % para el 2023. Este y muchos otros datos se desprenden del más reciente Análisis trimestral de la economía para el III trimestre 2023, proyección para I trimestre 2024 y el acumulado 2024, publicado recientemente.

Con base en estos precedentes, el Instituto pronostica el crecimiento, para este año que inicia, entre el 4,23 % y el 4,78 %.

Según el análisis, esto ocurre porque se toman en cuenta los mismos factores que impulsaron la economía nacional durante el 2023: una mayor productividad de las empresas en el régimen definitivo y un menor déficit fiscal del Gobierno Central en los últimos años, lo que ha producido una mejor nota por parte de las calificadoras de riesgo y, como si se tratara de piezas de un dominó, esto a su vez repercutió en una atracción de inversiones externas y de capitales más fuerte. Todo lo anterior sin olvidar que actualmente Costa Rica ofrece tasas de interés más ventajosas en comparación con las de Estados Unidos y otros países similares.

Eso sí, el IICE advierte que durante los próximos 361 días todo puede cambiar, debido al comportamiento de factores como el tipo de cambio, la inversión directa, el empleo, la situación fiscal, los precios internacionales de diferentes insumos, los conflictos entre países, los diferenciales de tasas de interés e incluso situaciones climáticas adversas.

Dinamización del régimen especial y definitivo

De la misma manera como sucedió en el informe anterior, el sector externo fue el gran responsable de esta mejora, según el análisis económico hecho por el personal del IICE, que incluso supera las cifras de otros países del mundo con condiciones similares o superiores a las de Costa Rica. Eso sí, su producto interno bruto (PIB) ha venido en descenso desde el primer trimestre del 2023 y pasó de una tasa de crecimiento interanual del 17,01 % en el segundo trimestre, a una del 12,14 % para el tercero.

Además, el régimen definitivo (la economía local) también mostró un crecimiento interanual importante, pero lejano del reportado por las zonas francas y la atracción de inversiones externas. Este pasó del 3,48 % en el segundo trimestre al 5,02 % para el tercer trimestre. Esto se explica en buena medida por el aumento en el consumo y la inversión, así como en el gasto del Gobierno, por ejemplo, en obras viales (sobre todo en el tercer trimestre del año pasado).

El consumo interanual de los hogares casi se duplicó entre los terceros trimestres del 2022 y del 2023. En el primer caso este fue del 2,70 %, mientras que el segundo alcanzó un 5,17 %. Mayoritariamente esto se explica por la subida de los gastos de servicios (que pasó de un 1 % a un 4,02 %).

En tanto, los sectores que más sumaron al crecimiento del PIB interanual fueron las actividades profesionales (1,57 %), de construcción (1,45 %) y de manufactura (0,90 %). En cambio, el sector de administración pública tuvo un descenso en su PIB (-0,05 %), y a este se suman electricidad, agua y saneamiento, junto con el sector agroalimentario (ambos con 0,02 %) y minas y canteras (0,03 %) como los de menor incremento.

Mercado laboral

De manera interanual, la ocupación y el total de horas trabajadas cayeron para el tercer trimestre del año pasado, en comparación con ese mismo periodo del 2022. En el caso de la ocupación, esta tuvo un descenso del 5 % debido principalmente a la baja en el personal que se desempeña en el comercio, la reparación y los quehaceres del hogar. En tanto, las horas trabajadas sufrieron una baja del 3,2 %.

En este mismo sentido, muy pocas actividades vieron incrementar su ocupación interanual, (como hoteles y restaurantes, con un 0,33 %; administración pública, con un 0,27 % y la industria manufacturera, con un 0,12 %). Como es evidente, estos aumentos fueron mínimos, lo cual no ayudó a equilibrar la caída mencionada en la ocupación. En cambio, actividades como los hogares empleadores (-1,61 %), comercio y reparación (-1,23 %) y comunicación y otros servicios (-0,94 %) sufrieron descensos considerables.

Para concluir con este apartado, se observa que hubo una reducción en el total de horas trabajadas y un aumento del PIB para el tercer trimestre del año pasado. Esto significa que hubo más productividad por hora laborada en este último periodo, que incluso superó al crecimiento interanual del PIB.

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó, pero sigue negativo

El IPC general tuvo una ligera recuperación interanual en noviembre con respecto a agosto del año pasado, pasando del -3,3 % a un -1,6 %. El IPC, menos alimentos combustibles y productos regulados, también sufrió una ligera recuperación, pasando del -0,8 % al -0,1 %. No obstante, ambos indicadores continuaron en números negativos y muy por debajo del rango de tolerancia de la inflación establecido por el Banco Central de Costa Rica, entre el 2 % y el 4 %.

La explicación que da el IICE de este leve incremento en ambas cifras es que las variaciones interanuales de los precios relacionados al transporte, alimentos y bebidas son muy negativas, y mantienen negativa la inflación interanual. Además, se espera que el IPC interanual mantenga la tendencia al alza y alcance en el primer trimestre de 2024 tasas positivas, impulsado también por las tasas bajas de interés que permiten a las personas tener más facilidad para solicitar préstamos para invertir y consumir.

Finalmente, en este apartado el crédito interno del sistema bancario nacional al sector privado decreció de septiembre del 2022 a septiembre del 2023, pasando de un 2,65 % para el noveno mes del 2022 a un -0,22 % para el año pasado. El crédito para el consumo, comercio y servicios fueron los que mantuvieron un pequeño comportamiento al alza (0,91 %), tal vez impulsado por la idea que tiene mucha gente de que las tasas de interés bajarán aún más.

Las exportaciones crecieron

Por su parte, las exportaciones acumuladas del año a octubre mostraron un incremento del 16,3 %. En cambio, las importaciones no sufrieron mayor variación con respecto a ese mismo mes del año pasado. Con esto el IICE concluye que a pesar de que el colón ganó valor con respecto al dólar (se apreció un 15 % con respecto a octubre del 2022), el sector exportador supo amortiguar el impacto del tipo de cambio en los costos de producción con un mejor posicionamiento en el mercado internacional, gracias al tipo de productos y servicios que vende fuera de nuestras fronteras.

Para más información sobre este informe, puede acceder al siguiente enlace: https://iice.ucr.ac.cr/2023/12/06/analisis-trimestral-de-la-economia-iii-trimestre-2023-proyeccion-para-i-trimestre-2024-el-acumulado-2023-y-el-acumulado-2024/.



Periodista: Pablo Mora Vargas
Oficina de Divulgación e Información
pablo.moravargas@ucr.ac.cr